SEXUALIDAD Y ESPERITUALIDAD

POR JUAN HERNANDEZ

En diversas ocasiones en esta columna hemos hablado sobre como la sexualidad se ha ido modificando a lo largo de nuestro desarrollo social, si bien es cierto que hay algunos elementos que han estado con nosotros desde el principio de la humanidad también existen otros que nos han ayudado a evolucionar y principalmente a ir más allá.

Para poder lograr esta meta en Occidente hemos encontrado: la religiosidad, que en diversas publicaciones se ha demostrado que ayuda por un lado, como un límite social para evitar tener cierto tipo de prácticas fuera del matrimonio, etc., y por otro lado, tal espiritualidad es entendida como ese vínculo que nos une con el resto de la humanidad, y que trasciende la naturaleza.

Esta última idea nos lleva a pensar que en varias culturas orientales principalmente en la china, (donde existe la creencia de que hay una relación directa entre las prácticas eróticas y la espiritualidad) las personas se van conectando como un todo con el universo.

Quizá este sea el asunto por el que algunas de nuestras lectoras, en algunos momentos de su vida, sienten que necesitan un break de sus antiguas búsquedas de pareja por lo que deciden encaminarse hacia otro tipo de fines más espirituales que sensoriales.

De entre tantas cosas que podemos reflexionar sobre el tema de la espiritualidad, está su relación con la sexualidad, ésta no solo se reduce al tema del cuerpo y el coito, sino que involucra una conexión integra y directa de una persona con otra e incluso con el universo.

En muchos casos podría decirse que dentro de la sexualidad la parte que más valoramos, cuando pensamos nuestra relación como algo importante, es el tratar no solo de mantenerla sino el saber que aun cuando físicamente se está lejos podemos pensar que esa persona puede hacerse presente en nuestra vida, lo cual nos lleva hacia nuevos caminos, nuevas sensaciones y por supuesto, nuevas vivencias.

Para leer más: Burris, J. L., Smith, G. T., & Carlson, C. R. (2009). Relations among religiousness, spirituality, and sexual practices. Journal of Sex Research, 46(4), 282-289. 10.1080/00224490802684582.